Como a esta senda no le conocíamos nombre alguno la hemos bautizado así por circunstancias obvias y así la llamaremos en lo sucesivo.
Iniciamos el recorrido por la senda de los jinetes y vamos a buscar el Camino de los Cayetanos (ecuatorianos) para desviarnos enseguida a la izquierda hacia el camino de la Casa del Mansanero.Nada más llegar a pie del monte aparece una senda que ya no se deja y va paralela al camino de los Cayetanos hasta el cruce de la Casa Zumbro donde acaba. Luego para darnos un garbeo nos dirigimos hacia la casa de Rovira y bordeamos los montes de Rovira y el Cojo para volver al mismo punto y hacer ahora la bajada de la senda que todo hay que hacerlo, no va a ser siempre subir.
De vuelta y a petición de algún participante, subimos al Castillo sin más fuste y bajada por el monte hacia el bar de la peña taurina (cosa rara) pues ya teníamos excusa para almorzar y charrar un poco que al final es lo que queda.